Instalar baldosas puede mejorar al instante el aspecto y la sensación de cualquier espacio.
Sin embargo, si no preparas la superficie adecuadamente, es posible que los azulejos no se adhieran correctamente y acaben provocando reparaciones costosas y que llevan mucho tiempo.
Para que tu instalación de baldosas sea un éxito, es esencial preparar la superficie cuidadosamente.
Limpia la superficie
Uno de los pasos cruciales en la preparación de la superficie es limpiar la superficie que recibirá las baldosas. Cualquier resto de suciedad, polvo o residuos puede impedir la adherencia de las baldosas, provocando huecos entre ellas y el posible fracaso de la instalación.
Comienza retirando los zócalos, molduras o accesorios que puedan estorbar. Barre o aspira bien la zona para eliminar el polvo y los restos. Utiliza un desengrasante o una solución limpiadora para limpiar la superficie y eliminar cualquier resto de suciedad o grasa.
Repara cualquier desperfecto
Antes de instalar las baldosas, asegúrate de que la superficie no tiene ningún desperfecto.
Si la superficie tiene grietas, agujeros o puntos irregulares, será imposible conseguir una colocación perfecta. Cualquier daño debe repararse, nivelarse y alisarse antes de proceder.
Utiliza una masilla adecuada para la superficie específica para reparar cualquier daño.
Si tienes suelos de hormigón, considera la posibilidad de utilizar un parche para hormigón, mientras que para suelos de madera, utiliza una masilla para madera. Asegúrate de que la masilla se seca completamente antes de continuar.
Nivela la superficie
Las baldosas necesitan una superficie plana y nivelada para evitar que se agrieten o rompan. Comprobar el nivel de la superficie es esencial para evitar el lippage, que es el desnivel entre baldosas. Para conseguir una superficie nivelada, considera la posibilidad de utilizar un compuesto autonivelante.
El compuesto autonivelante requiere mezclarse con agua antes de verterlo y extenderlo sobre el suelo. Sigue siempre las instrucciones del fabricante para garantizar una aplicación correcta. Asegúrate de extender el compuesto en una capa fina antes de que pueda secarse y endurecerse.
Deja tiempo para que se seque
Es crucial dejar tiempo suficiente para que cada paso se seque completamente antes de pasar al siguiente.
Si la superficie no está seca, la adherencia de las baldosas se verá comprometida.
El tiempo de secado puede variar según la superficie y las condiciones climáticas.
Sigue las instrucciones del fabricante sobre el tiempo de secado de cada producto.
Crea un entorno de secado adecuado asegurando una ventilación suficiente y evitando las temperaturas frías, que pueden alargar el tiempo de secado.
Imprimación de la superficie
Después de preparar la superficie, es esencial imprimarla antes de instalar las baldosas. La imprimación prepara la superficie para el adhesivo de las baldosas, y garantiza una mayor adherencia.
Antes de aplicar la imprimación, asegúrate de que la superficie está bien limpia y libre de restos o polvo. Sigue las instrucciones del fabricante sobre la aplicación de la imprimación. Deja que se seque durante el tiempo recomendado antes de pasar al siguiente paso.
Pensamientos finales
La preparación de la superficie es un paso crucial para el éxito de la colocación. Saltarse o precipitarse en el proceso de preparación de la superficie puede dar lugar a reparaciones costosas y a repeticiones que llevan mucho tiempo. Tómate tu tiempo y asegúrate de que cada paso se completa a fondo y correctamente.
Para recapitular, empieza limpiando la superficie a fondo, reparando cualquier daño, nivelando la superficie, dejando tiempo suficiente para que se seque e imprimando la superficie. Siguiendo estos pasos tendrás una base sólida para una colocación duradera.